(Español/English)
Este docudrama extraordinario comienza allá por 2006 con Vicenta, una empleada doméstica, viviendo con su hija Laura en un casa muy humilde del barrio de Guernica (provincia de Buenos Aires). El problema es que Laura, que tiene 19 años y retraso madurativo severo ("crece pero no crece", nos dice el relato en off) está con un embarazo de algunas semanas producto de una violación por parte de su tío. Asistida por el derecho establecido en el Código Penal desde hace un siglo para estos casos, Vicenta solicita que se le practique un aborto a su hija en el Hospital de San Martín, pero se encontrará con una desesperante e inhumana serie de peregrinajes, trámites y obstáculos para llevar adelante la intervención interpuestos por médicos medrosos y un sistema judicial inhumano pródigo, en todos sus niveles, de fiscales y jueces antiderechos.
El abordaje por parte de Darío Doria (director y coguinista )de la odisea de Vicenta y su hija es sumamente original: ellas dos y los demás actores de esta historia están representados por muñecos hechos con plastilina ubicados en escenarios minuciosamente diseñados a escala por la directora de arte Mariana Ardanaz. Pero no se trata de una película de animación stop motion: los personajes están en posiciones fijas y lo que se mueve es la cámara o supuestamente el escenario. Ellos tampoco hablan: una permanente e imprescindible voz en off (a cargo de Liliana Herrero) nos va relatando los sucesos en una segunda persona dirigida permanentemente a Vicenta, en una interpelación permanente (a ella pero también a nosotros) que resulta poética, elocuente y conmovedora.
Se suman imágenes de noticieros de la época, integradas a la escenografía (ya que el caso fue adquiriendo una gran notoriedad mediática) y el guión no nos ahorra la lectura de los indignantes fallos antiderechos que van obstaculizando la interrupción voluntaria del embarazo de Laura.
En vísperas de un nuevo tratamiento en el Congreso argentino del proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo, Vicenta es un documental imprescindible, una de las grandes películas argentinas del 2020 que describe una epopeya de resistencia frente a las miserias enquistadas en los poderes judicial y médico y un alegato sobre el inalienable derecho de las mujeres a disponer de sus cuerpos para evitar tanto dolor y maltrato.
Que sea Ley.
NOTA: la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo se sancionó en Argentina a fines de 2020 y se promulgó en enero de 2021.
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A Kafkaesque fight to achieve a legal abortion
This extraordinary docudrama begins back in 2006 with
Vicenta, a domestic worker, living with her daughter Laura hers in a very
humble house in the Guernica neighborhood (Buenos Aires province). The problem
is that Laura, who is 19 years old and has a severe maturational delay
("it grows but does not grow," the off-screen story tells us) is
pregnant for a few weeks as a result of rape by her uncle. Assisted by the law
established in the Penal Code for a century for these cases, Vicenta requests
that her daughter have an abortion at the San Martín Hospital, but she will
find a desperate and inhuman series of pilgrimages, procedures and obstacles to
carry out the intervention brought by fearful doctors and a prodigal inhuman
judicial system, at all levels, of prosecutors and anti-rights judges.
The approach by Darío Doria (director and co-screenwriter)
of Vicenta and her daughter's odyssey is extremely original: the two of them
and the other actors in this story are represented by dolls made with
plasticine located in settings carefully designed to scale by the director of
art Mariana Ardanaz. But it is not a stop motion animated film: the characters
are in fixed positions and what is moving is the camera or supposedly the
stage. They do not speak either: a permanent and essential voice-over (by
Liliana Herrero) recounts the events in a second person permanently addressed
to Vicenta, in a permanent interpellation (to her but also to us) that is
poetic, eloquent and touching.
Newsreel images of the time are added, integrated into the
scenography (since the case was acquiring great media notoriety) and the script
does not save us from reading the outrageous anti-rights rulings that are
hindering the voluntary termination of Laura's pregnancy.
Vicenta is an essential documentary, one of the great
Argentine films of 2020 that describes an epic of resistance in the face of the
miseries entrenched in the judicial and medical powers and a plea about the inalienable
right of women to dispose of their bodies to avoid so much pain and abuse.
Y fue ley!
ResponderEliminarAsí es, Diana!
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